Pereza

Habla de la belleza que vive en cada acto del ser humano, en cada palabra, en cada gesto y que trasciende, que vive, que pesa.

Tumbado sobre una naturaleza extensa, verde y negra, un bosque que aprovecharía mi cuerpo hasta la última gota, mi cuerpo se abandona, los músculos se dilatan sintiendo cada vez más cerca el contacto con la tierra, los huesos crujen cada vez que se hunden un poco más hacia dentro, siento que podría enraizarme aquí, que podría florecer la próxima primavera convertido en árbol, transformado en hierba.

En el tiempo y en el agua

"Los pasos reposados de los pies formaban ondas perfectas en la superficie del agua, y todos nosotros habríamos podido permanecer así, contemplando aquella fascinante belleza, envueltos en el respeto mágico de toda la sala.

En esta obra maestra de insuperable belleza podrían haberse impuesto tanto la estética masculinista como los efectismos, pero ese riesgo se ha superado desde un principio, ya que el coreógrafo se ha centrado con total determinación en la búsqueda del arte puro, sin hacer concesiones y basándose en la tremenda preparación física de ambos bailarines."

Traducción a la crítica de Agus Perez publicada en el diario BERRIA, el 1 de Marzo de 2015